Dios creó todas las cosas, con el poder de Su Palabra. Él formó un vasto universo y lo llenó de creaciones y criaturas que proclaman su poder. Desde el microbio más pequeño hasta la galaxia más extensa, “los cielos cuentan la Gloria de Dios y el firmamento proclama la obra de sus manos” (Salmo 19:1, RVA). El mismo Dios que nos creó a cada uno de nosotros – nos conoce por nombre- y se interesa por cada detalle de nuestras vidas. Lamentablemente desde el principio, cada persona le ha dado la espalda a Dios. Pero aún antes que diéramos la espalda, Dios tenía un plan de rescate radical para salvarnos. Nuestra naturaleza de pecado hace que pensemos, digamos y hagamos cosas que van en contra de Dios. La Biblia declara en Romanos 6:23ª que cada uno de nosotros está separado de Dios y merece el juicio eterno. No te preocupes, HAY ESPERANZA.

El Dios del universo vino a la tierra en forma de hombre. Jesús es el perfecto Dios-Hombre que vino a pagar el precio de nuestra rebelión y nos ofreció la oportunidad de experimentar la vida eterna. Ser rescatados de nuestro pecado por Jesús es la única manera que podamos recibir el perdón y la vida eterna. Su muerte en la cruz y su resurrección hace que el perdón esté disponible para todos.

El Dios del Universo ha hecho que su perdón esté disponible  para ti, pero no es automático. Tú puedes comenzar una relación llena de amor con Jesús y que dure para siempre, si le entregas tu vida a Él. Fuiste creado para disfrutar de una amistad preciosa con Jesús. Confiesa tus pecados e invítalo a que entre en tu corazón. Te aseguro que hoy comenzarás una nueva amistad con Jesucristo el Señor. 

Pastor Luis O. De León 

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