“José”, (nombre ficticio para proteger la identidad de este misionero), se dedica a introducir Biblias en países de acceso cerrado en Medio Oriente. Esta misión peligrosa comenzó en el año 1991. Dios contesto su oración que no quería ser un cristiano más, ni un misionero del montón. Entonces el Señor le encomienda proveer Biblias a los cristianos perseguidos en países donde es prohibido el Evangelio.
Durante todo este tiempo, el Señor ha realizado milagros extraordinarios permitiendo entrar las maletas llenas de Biblias sin ser abiertas las mismas en aduana. Y aunque lo han detenido en varias ocasiones, lo han encarcelado e interrogado, al final le permiten entrar al país y distribuir las Biblias. Dios es poderoso.
Carmen Peterson, Directora de Misiones