Para los años 50, se celebró en Londres, un concurso donde se le pidió a un sinnúmero de artista de todo el mundo, que representaran a través de un cuadro La Paz Perfecta. Hubo pinturas de muchos artistas, pero sólo tres cuadros llegaron a la final.
El primer cuadro representaba una madre son su hijo en brazos. El rostro de la madre y la expresión de seguridad y tranquilidad del infante era la mejor representación de la Paz Perfecta. El segundo cuadro se titulaba La Pradera. Una pintura donde se podía contemplar un cielo azul, unas imponentes montañas, un lago placido y muy tranquilo y a la distancia unos pastores pastando sus ovejas; una escena bucólica hermosa, esto es, según el autor del cuadro, la Paz Perfecta. El tercer cuadro estaba representado por una roca en medio del mar, un impetuoso aguacero con rayos y truenos, las olas que golpeaban con furia aquella roca y en medio de la gruta, un ave asentada en su nido cubriendo con sus alas sus polluelos, esto es la Paz Perfecta. ¿Cuál cree que fue la pintura ganadora? ¡Imagino que ya lo sabe! El jurado decidió que la pintura que representaba mejor el tema de la Paz Perfecta, era la del ave inamovible en su nido, cubriendo con sus alas sus polluelos dentro de la gruta de la roca, en medio de la lluvia, los truenos y la furia de las olas.
Paz Perfecta, no significa estar en un lugar sin ruidos, sin problemas, sin trabajo duro o sin dolor. La Paz Perfecta se manifiesta a pesar de estar en medio de todas estas situaciones, porque podemos permanecer calmados en nuestro interior. Esta PAZ sólo la puede dar, nuestro Señor Jesucristo. El mismo dijo: “La PAZ os dejo MI PAZ os doy; yo no OS la doy como el mundo la DA. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.”
Aun en medio de tus problemas, puedes tener la Paz de Dios a través de Jesucristo. ¿Tienes esta Paz Perfecta y Personal? Entrega TODA tu vida al Señor Jesucristo HOY.
Pastor Luis O. De León