En China, las autoridades exigen que en la reapertura de las iglesias se promueva «el patriotismo» más que alabanzas a Dios. Según el portal Bitter Winter, esa es la ordenanza principal para que las iglesias cristianas en el país puedan abrir sus puertas a la congregación luego de la pandemia por Covid-19.
Además de ello, deben izar la bandera de China y contar historias «inspiradoras» que hayan ocurrido en la pandemia y en las que haya intervenido las autoridades del gobierno. Desde la Iglesia Cristiana de Guangxi en el distrito de Shunhe de Kaifeng, uno de sus miembros declara para Bitter Winter que la reapertura de su iglesia «es completamente contraria a sus creencias».
«La iglesia finalmente reabrió sus puertas después de cinco meses, 147 días o 21 domingos, pero en lugar de cantar himnos para alabar a Dios, el gobierno nos exigió levantar la bandera nacional y cantar el himno nacional, alabando la victoria de Xi Jinping en la lucha contra la epidemia», declaró el creyente.
En otras iglesias, como en la provincia de Quanzhou, declaran que tuvieron que asistir a ceremonias de izado de banderas en el patio de sus iglesias, las cuales tenían frases comunistas en el dorso.
«El Departamento de Trabajo del Frente Unido y la Oficina de Asuntos Religiosos exigen celebrar ceremonias de izado de banderas y promover el patriotismo», dijo uno de los asistentes para Bitter Winter.
«De ahora en adelante, todas las iglesias tienen que hacerlo, o serán clausuradas y sus líderes serán despedidos», agregó.
Un pastor proveniente de la provincia de Zhumadian de Henan denunció que para poder abrir su iglesia tuvo que asistir a reuniones para estudiar los discursos del presidente Xi Jingping sobre el Covid-19.
«El gobierno exige promover estas cosas a las congregaciones después de la reapertura de las iglesias. Estos textos se «El gobierno exige promover estas cosas a las congregaciones después de la reapertura de las iglesias. Estos textos se publican en un folleto de más de 100 páginas», explicó el pastor.
«Los predicadores deben hablar principalmente sobre las políticas del estado. Quienes desobedecen serán arrestados», finalizó su declaración.
Las congregaciones afectadas denuncian que exigir esto sobre la creencia de un pueblo les «transforme la manera de pensar con respecto a la fe» y que disminuya el cristianismo.
Carmen Peterson
Directora de Misiones