“Más nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo…” Filipenses 3:20

Desde hace varias semanas, hemos visto caravanas, banderas, el sonido de las bocinas de los autos, consignas, bullicios (limitado por el Covid-19), griterías, música…etc. Todo esto es el reflejo del entusiasmo partidista preámbulo a las elecciones generales del próximo martes 3 de noviembre de 2020. El 31 de octubre se celebró La Reforma, más conocido como “Las 95 tesis”; una carta de Martin Lutero dirigida a la Iglesia Romana en la que desacredita la doctrina papal sobre las indulgencias, un acontecimiento histórico importante. Pero todo esto queda en un segundo plano, porque el énfasis mayor girará en torno a la contienda política y quién ganará las elecciones generales. Aunque nuestro escenario político plantea tres nuevos partidos políticos, a saber, Movimiento Victoria Ciudadana (MVC), Proyecto Dignidad (PD) y el candidato independiente Eliezer Molina, los partidos históricos promoverán las clásicas tendencias de estatus. El Partido Popular Democrático (PPD), hablará del E.L.A. (Estado Libre Asociado), el Partido Nuevo Progresista (PNP), hablará de la Estadidad y el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), hablará de la Independencia. 

Curiosamente, he encontrado que en la Biblia aparecen las tres fórmulas de estado tradicionalmente discutidas en nuestra política puertorriqueña, pero con un enfoque diametralmente diferente. Veamos:

Estado Libre Asociado (E.L.A.)- Marcos 10:28-30, “Entonces Pedro comenzó a decirle: He aquí, nosotros lo hemos dejado todo, y te hemos seguido. Respondió Jesús y dijo: De cierto os digo que no hay ninguno que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras por causa de mí y del evangelio, que no reciba cien veces más ahora en este tiempo; casas, hermanos, hermanas, madres, hijos, y tierras, con persecuciones; y en el siglo venidero la vida eterna.” Según este versículo el E.L.A. consiste en una libre asociación de amor y fidelidad con el Señor. Fuera de esa asociación hay pecado, corrupción y pobreza moral y espiritual.

Estadidad (Nuevo Estatus)– 2 Corintios 5:17, “De modo que, si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.” Es un nuevo estado espiritual, un nuevo reino y una nueva ciudadanía en total igualdad de privilegios con todos los santos de todos los tiempos.

Independencia- (Libertad)– Romanos 6:18, “Y libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia.”  Es reconocer que, si el Hijo nos liberta, solo así seremos libres. Es la absoluta certeza que el pecado esclaviza y que sin Cristo hay total anarquía. Estos tres modelos tienen cuatro cosas en común: Un Rey (Jesucristo), un reino (el reino de los cielos), una ciudadanía (La Familia de Dios) y una sola bandera (La Cruz de Cristo). Los gobiernos humanos y sus propuestas de estado son limitados, defectuosos e incongruentes. Lo que propone nuestro Señor Jesucristo para vivir aquí y en la eternidad es lo que yo llamo el ESTADO PERFECTO.

Pastor Luis O. De León

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