Hace muchos años  leí un libro que transformó mi concepto de misiones y evangelización.  El título de ese libro es PASIÓN POR LAS ALMAS, del  Dr. Oswald J. Smith. Es un clásico de la literatura evangélica que sigue impactando, como pocos libros en la historia, la vida de millares de lectores. Este pastor y evangelista canadiense fue conocido por sus grandes conferencias misioneras celebradas en la iglesia “Peoples Church (iglesia de los pueblos) en Toronto, Canadá, la cual pastoreaba y se convirtió en la referencia y modelo de una iglesia misionera. El corazón y la fuerza impulsadora, hasta el día de hoy, es el evangelismo y las misiones. ¿Cómo llego él a sentir esta pasión?

En una conferencia misionera, un joven le hace entrega de la tarjeta de promesa de fe. Tan pronto la recibe comienza una lucha en oración con el Señor donde le expresaba que no tenía dinero para hacer semejante promesa. Argumentaba con el Señor  que solo ganaba $25.00 semanales y eran muchas las responsabilidades para hacer una promesa económica por un año. Dios habla a su corazón y le dice: ¿Hasta cuánto puedes confiarme?…No se… dice Oswald. Dios habla a su corazón nuevamente y le dice: prométeme $50.00 dólares. La gran sorpresa fue que al terminar el año, Dios le envió el dinero y Oswald duplicó la suma original por más de 30 años contribuyendo a la obra misionera.

La pasión de Dios sigue siendo la misma: alcanzar hombres y mujeres que tengan un encuentro personal con Jesucristo. Cuando te comprometes con Dios en su pasión, no solo te dará el dinero para cumplir la promesa, sino que tú mismo serás saturado de la pasión de Él.

Dios está buscando gente con pasión celestial. ¿Quieres ser tu parte de este ejército? Pregúntale a tu corazón. 

Pastor Luis O. De León

Categories: Reflexiones