Lo que usted intentó leer, no fue un error gramatical. Esta frase en el “Kreyol”, que es un dialecto haitiano- una mezcla entre francés, inglés, español y varios dialectos africanos- significa: “Dios habla todos los idiomas de la tierra”. ¡Qué gran verdad expresa esta frase!
Hace una semana, un grupo de hermanas, junto con el Pastor y su esposa, salimos a una aventura espiritual, envueltos en la pasión misionera hacia Dajabón, Republica Dominicana, específicamente en el sector Loma de Cabrera, que precisamente es frontera con Haití. Allí escuchamos y palpamos de cerca el problema de la xenofobia entre dominicanos y haitianos, pero también escuchamos del avivamiento que Dios está trayendo a este país, desvastado por la pobreza y el terremoto que los azotó hace más de un año. La Alianza Cristiana y Misionera comenzó un orfanatorio, escuela e iglesia, con la ayuda de la catedral de la Esperanza en Rio Piedras, allí en Haití, la cual tiene una asistencia de 800 personas y siguen aumentando. El pastor de la Alianza en Loma de Cabrera, José Grover, en estos días cruzarán la frontera para predicar y discipular en Haití. El mundo ha olvidado a Haití, pero Dios no se ha olvidado de ellos.
El Pastor y Misionero Eliacim Torres, que dirige la Misión Internacional, “Iglesia de Dios Valles de Bendición, Inc., será nuestro invitado en esta mañana para hablarnos de su llamado y trabajo en Haití. Es un siervo de Dios, apasionado con las misiones, especialmente en Haití, a tal grado, como bien lo expresó en un artículo que leí en la revista El Heraldo Cristiano publicada en Tampa, Florida: “Soy puertorriqueño de nacimiento y haitiano de corazón”.
Dios es un Dios misionero y cuando emprendemos el cumplimiento de su mandato de predicar el evangelio a todas las naciones, no hay cultura, no hay idioma, no hay dinero, nada que limite el proclamar que JESUCRISTO ES EL SEÑOR. ¡AMEN!
Pastor Luis O. De León