Hechos 27:20-25

Hay momentos en la vida que parece que estamos en medio de una tormenta.  Es impresionante ver cuando la naturaleza se enfurece y arremete contra todo, pero aún en medio de la tormenta la voluntad de Dios se va a cumplir en tu vida:   Será como Dios ha dicho y lo que va a ser, será.

El apóstol Pablo, en su viaje a Roma, tuvo que enfrentar una terrible tormenta.  Mientras el viento rugía a su derredor, cuando la barca naufragó y las olas amenazaban con tragar la embarcación, él iba confiado en una palabra que Dios le había dado con anterioridad.

Dios prepara a sus hijos de forma espiritual cuando se acerca una tormenta.  Si te encuentras en medio de la tormenta de tu enfermedad, tu problema o crisis financiera, si sientes que tu barca está a punto de naufragar, el Dios que confortó a Pablo te dice:  No temas ni desmayes porque yo estaré contigo dondequiera que vayas.  Jehová es tu pastor.  Sólo créele a Dios, confía en las promesas de vida que hay en Su Palabra y espera en El. 

Gloria Vidal de Albó

Categories: Reflexiones