Pablo y Wilma se casan en Santiago, Chile en 1969.  Luego de 15 años de casados, Pablo tiene varios amoríos y Wilma se enamora del mejor amigo de Pablo, provocando esto una crisis matrimonial apunto del divorcio.  Un amigo de ellos conociendo la crisis que estaba pasando este matrimonio, les invita a un Encuentro Matrimonial (ALMA).

Ellos aceptaron ir por compromiso, pero sin ninguna esperanza que su matrimonio fuera a ser restaurado. La primera noche discutieron tanto que Pablo decidió irse para su casa, pero como estaba tan oscuro el estacionamiento no pudo encontrar el auto y decidió quedarse.

El sábado en la mañana Dios comienza a tocar el corazón de ambos, escuchando el testimonio de una mujer que estaba relatando exactamente la situación que Pablo y Wilma estaban viviendo y cómo Dios restauró su matrimonio.  Ambos salieron muy impactado por el Señor de ese Encuentro y deciden entregar sus vidas al Señor con la expectativa de que su matrimonio vuelva a la felicidad.

Luego de esta experiencia, siete años después, vinieron momentos difíciles que pusieron a prueba su matrimonio.  Pablo, durante un examen médico sufrió una lesión en la médula espinal y quedo paralizado de la cintura para abajo.  Aunque Pablo todavía no camina, juntos siguen testificando del poder que transformo sus vidas, su matrimonio y cómo a través de esta experiencia tan difícil, su relación con Dios y su matrimonio se fortalece cada día más.