Dios a veces sana en maneras maravillosas, pero otras veces, Él no sana de acuerdo con lo que deseamos, porque hay unos propósitos donde nuestra fe debe ser fortalecida. Dave y Chris Manfred, obreros de la Alianza en Camboya relatan cómo Cristo eligió sanar a Chris no una, sino dos veces en respuesta a la oración.
Todo comenzó cuando Dave y Chris necesitaban una certificación médica para seguir trabajando como misioneros en Camboya. En ese proceso, descubrieron que Chris tenía un mal funcionamiento en la glándula tiroides. Esto implicaba el gran peligro de no regresar a Camboya. Estando en unas conferencias para obreros de la Alianza cuando regresan de su servicio en el extranjero, un matrimonio estaba enseñado acerca de la sanidad. Dave y Chris deciden pasar al frente para oración y le cuentan a este matrimonio los síntomas y todo o que le molestaba a Chris. Ese mismo día ella no sintió nada, pero a medida que pasaba la semana, Dios hizo el milagro.
Pero en ese mismo año, Chris comenzó a sentir otros síntomas. Su condición física fue empeorando y en Chris comenzó a crecer la duda si el Señor le había sanado de la tiroides. Estuvo muy confundida y no sabía que otro asunto estaba pasando en su cuerpo. Visitaron nuevamente al médico y luego de varios laboratorios descubren que una glándula detrás de la tiroides, la paratiroides, no estaba funcionando bien. Nuevamente estaban en peligro de no regresar a servir al Señor en Camboya.
En una iglesia donde fueron invitados hablar de su trabajo en Camboya, el pastor y su esposa fueron movidos por el Señor a orar por ellos por sanidad. Dios sano nuevamente a Chris. Jesús es nuestro salvador. Dave y Chris salieron a Camboya pero allí les esperaba otra gran prueba de fe.
Carmen Peterson
Directora Ministerio de Misiones