“Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡Cuán grande bosque enciende un pequeño fuego!” Stg.3:5

La muerte y la vida están en el poder de la lengua, expresa Proverbios 18:21. Más de lo que nos damos cuenta, las palabras que hablamos afectan la vida y el destino, tanto en nosotros, como aquellos a quienes las hablamos. La palabra hablada no solo lleva significado, también libera poder; poder para bien o poder para mal. Quiero compartir siete pasos para aprender la disciplina de redimir nuestro hablar:

  1. Arrepiéntase y pida el perdón de Dios por los chismes y las calumnias que haya dicho. Cuando decimos algo odioso o negativo injustamente de nuestro hermano(a) en Cristo o nuestra iglesia, lo estamos diciendo al Señor.
  2. Discúlpese y pida perdón a la persona injuriada. Siempre que sea posible. “Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.” (Hebreos 12:14)
  3. Resuelva pensar antes de hablar. Debemos recordar, antes de decir alguna crítica, la manera en que nos sentimos la última vez que mintieron y nos criticaron injustamente. Nuestras palabras siempre tienen efectos: positivos o negativos.
  4. Deje que las habladurías terminen con usted. Quizás no podemos impedir que otros hablen mal de sus hermanos cristianos, pero sí podemos decidir que lo que digan terminará con nosotros.
  5. Si tiene que decirlo a alguien, dígaselo primero a Dios. El Señor le traerá paz y quietud para tomar las decisiones correctas. Siempre hay la tentación de buscar personas que piensen como nosotros, para muchas veces crear animosidades y alimentar el resentimiento. Busque hermanos(as) maduros en la Fe para resolver cualquier asunto.
  6. De cuentas por lo que dice. Sea responsable con sus palabras. No hable SIN EVIDENCIAS CONCRETAS.
  7. Haga un voto solemne de ser un animador, en vez de un crítico. No miremos los defectos, siempre los encontraremos. Busquemos las virtudes, y siempre las encontraremos.

TENGA LENGUA SANTA, NO LENGUA LARGA.

 Pastor Luis O. De León

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